Mitos y leyendas. Arión, el caballo alado

 

En la mitología podemos encontrar siempre diversas fuentes y leyendas para un mismo personaje u mito. Este es el caso de Arión, el caballo alado con el don de la palabra y ver el futuro. Aunque en todos los mitos hay un punto de unión, el dios del mar Poseidón. Se cuenta de él que fue un gran semental alado, con pezuñas negras y porte genuino. Además de tener el don del habla, podía ver el futuro, además de poseer la inmortalidad debido a su procedencia divina. Junto a él nació su hermana Despoina, la cual estuvo relacionada durante mucho tiempo con cultos mistéricos y solo los iniciados podían llegar a saber su nombre. En otro post hablaremos de ella.

Muchos héroes míticos montaron a su lomo, desde Heracles hasta los reyes de Arcadia o Argos. Poseer al místico caballo era sinónimo de victoria, por lo que pasó de manos en manos de héroes y reyes.  

El mito más extendido de su nacimiento es aquel que cuenta como el dios del mar Poseidón, sedujo a su hermana la diosa Deméter. Aunque existen muchas versiones sobre el nacimiento y la vida de esta magnifico y extraordinario caballo.

Poseidón y Deméter

Poseidón era el dios supremo del mar y los océanos. Tenía una estrecha relación con los caballos, tanto que era considerado su creador. En este mito, encontramos como Poseidón intenta seducir a la diosa Deméter, pero está dolida y atormentada por el rapto de su hija Perséfone, lo rechaza. Como el dios no cesaba en sus intentos, Deméter opta por convertirse en un grácil yegua para evitar así a Poseidón (fig. 1). Pero poco tardo el dios en descubrirla. Rápidamente se transforma en un caballo y viola a su hermana. Esta quedó embaraza por el dios, dando a luz a dos hijos como resultado. Por un lado una niña, llamada Despoina, por otro lado un caballo, Arión.

Fig. 1. Deméter huyendo de los acosos de Poseidón convertida en yegua. 

Según las leyendas, esto sucedió en la zona de la antigua Arcadia, por lo que el mito cuenta que su rey Oncio se apoderó del caballo. Poco después Heracles pasó por Arcadia y le pidió al rey el famoso caballo. Gracias a Arión, Heracles conquisto la ciudad de Élide. Su siguiente poseedor fue el rey de Argos, Adrastos (fig. 2), el cual necesito de su ayuda durante la batalla de los Siete contra Tebas. Según se cuenta, los hermanos Eteocles y Polinices se mataron entre sí por conseguir el trono de Tebas, pero Adrastos gracias a la intervención de Arión, salvó la vida.

Fig. 2. Adrastos.

Poseidón y el tridente

En la mitología romana, el nacimiento de Arión fue el resultado de como el dios Neptuno, tras un gran desencuentro con la diosa Minerva, hinca su tridente en la tierra y de él brota el famoso caballo (fig. 3). Minerva y Neptuno estaban en constante disputa, casi siempre por ser patrones de alguna ciudad, véase Atenas. En este caso, los dioses se disputaban el derecho de dar nombre a la ciudad de Cecrops.

Tras brotar el caballo del tridente, Poseidón lo puso en su carruaje, regalándoselo a Capreo, rey de Aliarto. Este posteriormente se lo daría a Hércules que lo usaría para ayudarse a completar sus famosas doce pruebas.

Fig. 3. Ilustración de Arión junto al tridente de Poseidón. 

Gea

Algunos mitos, cuentan que Arión nació de la diosa de la Tierra Gea. Según estos, Gea por partenogénesis dio vida al caballo. Por lo que no tendría padre conocido.

Al igual que ocurre en los demás mitos, se le describe como un corcel con pezuñas negras, capaz de hablar y volar con sus alas. Otros mitos, relatan como Arión era un caballo negro, con crin rojo fuego (fig. 4). Incluso, algunos relatos cuentan que tenia pies humanos al ser una mezcla de humano y animal.

Fig. 4. Posible aspecto físico de Arión.

Entre sus poderes están la inmortalidad, al ser de origen divino. Es por esto, que vemos que Arión ha ayudado a tantísimos héroes en distintos momentos. Además, tiene supervelocidad y vuelo (fig. 5). En la Ilíada de Homero, se narra como este caballo participó en una carrera de cuadrigas donde ninguno puedo vencerlo. Es más se cuenta que era capaz de correr por el agua, gracias a su gran velocidad.

Fig. 5. Arión con las alas que según el mito tenia.