Grandes mujeres de la Antigüedad. María Estuardo, la reina mártir

En la Antigüedad, las mujeres eran consideradas meros objetos e inferiores a los hombres. Existían para complacer a los hombres y engendrar las nuevas generaciones. Pese a esto, muchas se enfrentaron a su destino y se labraron un camino lleno de éxitos y poder. Sin estas valientes mujeres, posiblemente mucho de lo acontecido en la historia hubiera sido posible. Pese a la posición secundaria que se les daba, muchas obtuvieron un gran poder. Algunas desde las sombras, otras por su sangre real y unas pocas por sus éxitos bélicos o su belleza. Fuera como fuese, la verdad es que a lo largo de los siglos encontramos un sinfín de nombres relevantes, que deben ser recordados. Cleopatra, Hipatia, Isabel I de Inglaterra u Olimpia de Epiro, son algunas de estas mujeres relevantes de la historia, que lograron igualarse a los hombres, en un mundo completamente heteropatriarcal.

La primera de estas mujeres de las que hablaremos es María Estuardo, reina de Escocia. Mucho se ha hablado de ella, pero pocos conocen su verdadera historia. En la actualidad tenemos varios largometrajes que narran su trágica vida. Pero en ocasiones, estas películas cuentan y ajustan la verdadera historia para otorgar más dramatismo o tensión a las cintas.

María Estuardo, hija de Jacobo V de Escocia y María de Guisa, nace en Escocia, el 8 de diciembre de 1542, época llena de tensiones y hostilidades. Es un momento lleno de problemas religiosos, que llevan a una reforma protestante y a la ruptura de varios países con la Iglesia Católica. Este cambio de doctrina causa grandes estragos permanentes para la sociedad del s.XVI.

Escocia se encuentra en gran tensión debido a las guerras constantes con el país vecino. Dicha tensión se debe en parte a la ruptura de Inglaterra con la Iglesia católica y al afán de su rey de conquistar Escocia. Por otro lado, la alianza del monarca escoses con Francia, provoca aun más a Enrique VIII, rey de Inglaterra. Finalmente, tras la batalla de Solway, en la que Jacobo V y Enrique VIII enfrentan sus ejércitos, Inglaterra sale vencedora.

La muerte del rey Jacobo, junto a su primera esposa y sus hijos varones, provoca que Escocia quede sin heredero varón. Siendo la única heredera al trono María Estuardo, quien tenía apenas unos años de vida. La regencia recaerá en manos de su madre, María de Guisa.

Enrique VIII, rey de Inglaterra, decide mover los hilos y propone la unión de ambos países mediante el matrimonio de sus dos herederos. De este modo, María quedaría prometida al príncipe de Gales al firmar el Tratado de Greenwich en 1543. Este hecho no le sienta bien a los escoceses. Además, Enrique VIII quería que Escocia rompiera su pacto con Francia (gran enemiga de Inglaterra) y se uniera a él en su afrenta contra el reino franco.

Enrique VIII de Inglaterra.

El parlamento escocés acaba rompiendo el tratado debido a varios factores. En primer lugar, Enrique VIII quería tener retenida a María en Inglaterra mucho antes de la boda. Siendo criada por él, podría influenciarla a su antojo. Además el parlamento escocés temía el rechazo del pueblo, con sus consiguientes sublevaciones. Por lo que se rechaza la unión.

Esto molestó mucho a Enrique VIII, quien decide imponer ese matrimonio a la fuerza, hecho que se le conoce como “cortejar a la inglesa”. De modo que empieza una oleada de incursiones militares en Escocia que duraría hasta 1551. En 1547 se produce el conocido “Sábado Negro” donde los escoceses sufren una grave derrota, este hecho provoca el temor en María de Guisa, por lo que envía a la pequeña reina al priorato de Inchmahome.

Durante esto, el rey francés Enrique II, propone unir ambos reinos casando al Delfín de Francia con la heredera escocesa. María de Guisa, sin elección aparente ve en esta alianza la salvación de su hija. En febrero de 1548, con los ingleses a las puertas de su castillo, María decide enviar a su hija al castillo de Dumbarton. Pocos meses después, en julio, se realizaría la firma del tratado nupcial entre Francia y Escocia. El 7 de agosto de 1548 la flota francesa enviada por el rey Enrique II, regresa a Francia desde Dumbarton con la futura nueva reina de Francia y Escocia.

A la edad de 5 años María llega a Francia en total ausencia de sus padres, no obstante quizás esa sería la época de mayor felicidad de la pequeña reina. Coronada ya como soberana de los escoceses, llega a la corte francesa como prometida del Delfín de Francia. Durante los próximos diez años le acompañaran en su periplo francés las llamadas “cuatro Marías”. Cuatro jóvenes que considerará como hermanas. Todas de su misma edad y que casualmente se llamaban igual que la propia reina. Estas muchachas provenían de las mejores y más nobles familias de Escocia.

Recibió la mejor educación que se podía obtener en esos tiempos, supervisada en todo momento por la que sería su futura suegra, Catalina de Medici. Al concluir esta época contaba en su poder con un extenso dominio de varias lenguas incluida la escocesa, lengua nativa de la reina.

María Estuardo contrajo matrimonio con el Delfín de Francia en la catedral de Notre Dame en 1558. Poco tiempo después en julio del siguiente año fallecería el rey Enrique II de Francia, durante las celebraciones de la paz de Cateau-Cambreis. Durante dichas festividades resulta mortalmente herido durante una justa, lo que convierte a María y Francisco en reyes de Francia.

María y Francisco tras su boda

Además, por si fuera poco la reina María era segunda en la línea de sucesión de la corona inglesa, por detrás de la primogénita de Enrique VIII, la supuestamente ilegitima Isabel Tudor. La reina Isabel, al no tener sucesores dejaba abierta la puerta a que María reinara tras ella. Por otro lado, la Iglesia Católica apoyaba fervientemente la legitimidad al trono ingles de María, ya que consideraba a Isabel una bastarda nacida de un matrimonio no consentido por la iglesia. Enrique VIII, quizás contrariado por el feo que se le hizo al no otorgarle la mano de María a su hijo, promulga la llamada “Acta de Sucesión Pro-Protestante”. En ella deja claramente explicito que ningún Estuardo podría obtener el trono inglés. Lo peor sin duda, fue que las revueltas protestantes en Francia, hicieron imposible que María pudiera frenar la conversión al protestantismo de su país.  

La felicidad de María con su matrimonio seria breve, al siguiente año de casada muere Francisco I de Francia y no solo él, sino también su madre María de Guisa morirá ese mismo año. Dejando en manos de los protestantes el trono Escocés. La muerte del rey de Francia convierte a su madre, Catalina de Medici en reina regente debido a que María no consiguió dar un heredero a la corona francesa. Tras la muerte de María de Guisa, los representantes de la reina María firman un tratado por lo que las tropas francesas dejan Escocia. Dando vía libre a los ingleses para su posible conquista. María se niega a firmar dicho tratado y a la edad de 18 años regresa a Escocia para retomar las riendas de su reino.

Los conflictos religiosos en Escocia marcan esta primera etapa de María en su país natal. A raíz de la Reforma también había llegado a Escocia el pensamiento protestante. Aunque a decir verdad, solo los nobles abrazaron esta doctrina ya que el pueblo llano siguió siendo mayoritariamente católico. Tras la muerte de su madre, el parlamento decreto que el reino se convertía en protestante, con lo que la llegada de una reina católica no hacía sino avivar los futuros enfrentamientos religiosos, y un gran escepticismo de los nobles escoceses. María tuvo que convertirse al presbiterianismo aunque esto no ayudo en casi nada a equilibrar su estancia en el trono.

Retrato de María en su juventud.

La religión había dividido a su pueblo y su hermano ilegitimo Jacobo Estuardo, Conde de Moray, había sacado provecho de ello convirtiéndose en la cabeza de los protestantes en Escocia. La reina María jamás se decantó por un bando e intento que hubiera paz entre ambas doctrinas. Decepcionando por tanto, al bando católico al no apoyarlos abiertamente y al no defender su causa.

Pero lo que peor llevaría María serian las relaciones con su prima Isabel I de Inglaterra. Existieron varios intentos para que ambas reinas se conocieran y llegaran a un acuerdo, pero esto jamás llego a buen puerto. Por su parte Isabel intentó chantajear a María, proponiéndole un futuro marido de su elección, llegando así a considerarla como sucesora suya en el trono inglés. De este modo Isabel conseguía controlar a María y ponerle un marido protestante, consolidando esta doctrina en las fronteras escocesas. La reina rechaza este trato y contrae matrimonio con su primo hermano Enrique Estuardo, duque de Albany. Hay que recordar que el duque de Albany, también descendía de la misma línea que ella e Isabel, por lo que la unión de estos hacia más fuerte su intento de acenso al trono inglés.

María con su segundo marido, Enrique Estuardo.

El matrimonio con Enrique Estuardo cambió en gran medida la vida de María, dándole un heredero, Jacobo. Pero también perjudicó gravemente la política llevada a cabo por la reina y poco a poco se fue convirtiendo en un obstáculo al reclamar para sí mismo el título de “rey”. En 1567 y bajo la premisa del nacimiento del hijo de ambos Jacobo, se orquesta un complot en contra del duque de Albany para eliminarlo y deshacerse del problema que conllevaba su existencia en la corte escocesa. Este hecho perjudica seriamente a la reina que se ve manchada por el escándalo. Jacobo Hepburn, IV conde de Bothwell, fue el líder de este complot y futuro tercer marido de la reina María.

Para María ya era tarde, había perdido el apoyo tanto militar como de la nobleza que se encontraba dividida. Por lo que se produce un gran levantamiento y obligan a la reina a abdicar., viéndose obligada a exiliarse a Inglaterra y pidiendo apoyo a su prima Isabel. La reina inglesa, acabaría por recluirla durante 18 años.

Oleo de la Reina María de Escocia.

Durante este periplo de 18 años, su hijo Jacobo es coronado como rey de Escocia con apenas un año de edad, al igual que lo hicieran con su abuelo y su madre. Fue puesto bajo la tutela de su tío, Jacobo Estuardo, el cual ejerció la regencia mientras este crecía.

El apresamiento y juicio de manos de su prima Isabel I tiene como pretexto el asesinato de su segundo marido, ya que era un lord inglés. Durante los siguientes 18 años de su encierro no cesó en sus intentos, tanto de escape como de deshacerse de su prima. En 1584 Isabel I promulga el “Pacto de la Asociación” el cual evitaba que cualquier sucesor se beneficiara de su asesinato. De esta forma intentaba frenar las conspiraciones por parte de María en contra de ella. Este pacto fue firmado por todos los nobles de la corte incluyendo a la propia María Estuardo.

Finalmente en 1587 seria oficialmente acusada de traición e intento de asesinato de Isabel I, siendo condenada a muerte. 40 nobles de la corte inglesa ratificaron esta acusación incluso nobles católicos. Acaba sus días a los 45 años y vestida de rojo ya que se auto-denomina mártir católica, fue decapitada torpemente (hubo que asestarle hasta tres golpes con el hacha para separarle la cabeza del cuerpo) en el Castillo de Fotheringhay el 8 de febrero de 1587.

Mascara mortuoria de María conservada en el Lennoxlove Castle.

Como dato curioso hay que contar que en vida jamás conoció a su gran rival Isabel I, pero en la muerte están juntas a tan solo nueve metros de separación la una a la otra. Esto es debido a que tras su muerte fue enterrada en la catedral de Peterborough, pero tras la coronación de su hijo Jacobo I de Inglaterra y VI de Escocia, como rey de ambos reinos, traspaso sus restos a la abadía de Westminster. Situándola cerca de su prima y ejecutora.

Sepulcro de la reina en la Abadía de Westminster a tan solo 9 metros del de Isabel I.

Por último, la vida intensa, corta, apasionada y sobre todo trágica de la reina de Escocia, ha sido de gran reclamo y atractivo para el celuloide. Desde su nacimiento estaba llamada a quedar en los anales de la historia. Hay que recordar, que su coronación fue una noticia que corrió como la pólvora por toda Europa, con apenas un año le impusieron el cetro ceremonial y la capa típicas en estas celebraciones, incluso tuvieron que hablar por ella y mantenerla de pie para terminar su coronación.

Katharine Hepburn como María Estuardo.

Su vida puede resumirse en una historia plagada de fatalidades y desamores con un trágico final que fue su decapitación. A lo largo de estos últimos años muchas películas han dado vida a los acontecimientos más importantes de la vida de María Estuardo, resumiendo mejor o peor el transcurso de su historia. Desde la magnífica Katharine Hepburn en “María Estuardo” o la no tan conocida Adelaide Kane de la serie “The Reign” de la CW, todas han intentado plasmar la vida de esta reina en un mundo rodeada de reyes y conspiraciones. Donde reinos tan poderosos como Francia e Inglaterra se disputaban controlar su vida. En el transcurso de pocos años la vida de esta reina pasa de un auténtico paraíso al peor de los infiernos, por lo que es un gran reclamo para el cine y un auténtico gusto para las actrices que interpretan su vida por todos los matices que conlleva ser María Estuardo. En la actualidad, podemos ver la película “Maria, reina de Escocia” (2018), de la mano del director Josie Rourke. Esta película es un relato bibliográfico de la etapa más oscura de la vida de la reina. Saoirse Ronan y Margot Robbie, dan vida a María de Escocia e Isabel I de Inglaterra respectivamente, en una de las películas más fieles sobre la vida de esta reina que he podido ver.

Adeline Kane como la joven María de Escocia.

Saoirse Ronan y Margot Robbie como María de Escocia e Isabel I de Inglaterra respectivamente.

Antes de acabar estos últimos párrafos tengo que hacer mención no solo al cine o la televisión que se han nutrido de la vida de esta grandiosa y desconocida reina. Sino que también existen numerosas operas, novelas e incluso canciones inspiradas por la vida y obra de esta peculiar reina mártir, como el famoso poema épico de Lope de Vega, Corona Trágica.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS:

Carreño-Rodríguez, A. (2014): “Corona trágica: vida y muerte de la serenísima reina de Escocia María Estuardo.” Madrid: Cátedra.

Coloma, L. (1907): “La reina mártir: apuntes historicos del siglo XVI.” Alicante, Imprenta La Voz de Alicante.

Guy, J. (2007): “Maria Estuardo”. Biografia Edhasa.

Rodriguez Gonzáles, C. (2006): “Maria Estuardo: la creacion de un icono nacional.” Biblioteca de Mujeres.

Recurso electrónico:

http://www.buscabiografias.com/bios/biografia/verDetalle/4248/Maria%20Estuardo%20-%20Maria%20I%20de%20Escocia